El sábado compartí la noche con mi ahijada Luna. Es toda una aventura digna de mención si tenemos en cuenta que tiene casi siete años y las consiguientes salidas dignas de su edad.
La tarde anterior iniciamos los preparativos de la velada. Organizamos sesión de cine con sofá, mantita y palomitas. A pesar de que es una niña de su tiempo y gran fan de las series de dibujos del momento, le encanta que le pongamos pelis de cuando su madre y yo éramos pequeñas. En esta ocasión, tras remover entre mi filmoteca particular seleccionó “La Bruja Novata” y “Mary Poppins”. La primera fue todo un hallazgo porque aún no la había visto pero la segunda nos la sabemos ya de memoria….
Así que el sábado noche cuando nos quedamos solitas en penumbra, con un inmenso bol de palomitas y acurrucadas debajo de la manta, nos dispusimos a ver a Angela Lansbury haciendo sus primeros hechizos antes de convertirse en la señora Fletcher.
Se quedó tan alucinada por la película que mientras yo hacía la cena de las dos, se puso a revisionar aquellas escenas que le habían impactado y los trozos musicales para aprenderse las canciones.
Por suerte para mi, conseguí evitar la tortura de ver a Julie Andrews por quincuagésima haciendo de Supernanny. Por fin, y después de mucho insistir, conseguí llevarla a la cama cerca de la una de la madrugada. Debo confesar que me encanta dormir con ella porque, aunque ronque y se mueva más que los precios, está suave y calentita y siempre pone su mano en mi mejilla mientras le acaricio la espalda hasta que se duerme…
Pero esta noche prometía ser larga…La culpa de todo la tiene la cabalgata de Reyes. Os resumiré los hechos:
Como cada cinco por la tarde y abrigados hasta las orejas, nos apostamos en la calle esperando el bombardeo de caramelos de la cabalgata. Luna y yo formamos un gran equipo recolector de dulces. Mi misión es portar la bolsa vacía cerca de ella para que pueda llenarla con todo lo que cae al alcance de sus manos.
A nuestro lado se posicionó un grupo de (seré considerada) “señoras de la tercera edad con el ansia de algo gratis”, yo intuía problemas y me mantuve alerta. Al empezar el diluvio de caramelos, las señoras perdieron el calificativo de tales y se convirtieron en viles mutantes sedientos de azúcar. El resultado fue que acabaron pisando la mano de Luna haciéndole sangre en uno de sus deditos. Luna empezó a llorar pero no por el dolor sino porque tenía que dejar de coger caramelos para ir a curarse… En ese momento todo sucedió muy deprisa, noté un estallido de color esmeralda en mis pupilas al mismo tiempo que una rabia visceral me recorría el cuerpo haciendo estallar mis ropas ante un centenar de músculos verdes… Convertida en Hulk, espabilé a las Abuelas Mutantes y a un Villano que, armado con un paraguas, estaba robando todos los caramelos que caían delante de los niños…
Cuando regresé a mi forma humana, Luna había vuelto a escena con el fin de recuperar el tiempo perdido y me miraba con cara de admiración. Desde ese día, no deja de preguntarme acerca de mi transformación y de pedirme que hagamos cosas de superhéroes.
Por eso el sábado noche y ante mis constantes súplicas para que se durmiera, una frase contundentemente irrefutable salió de sus labios: “Pero Airene si eres un superhéroe tan fuerte, ¿cómo aguantas tan poco despierta?”
…Eso me pasa por mostrar mis superpoderes en público…
jaja. Muy bueno. Iba a poner que menudas ocurrencias las de los crios, pero... si es que tiene toda la razón del mundo!
ResponderEliminarY yo que pensaba que sólo erán asi de "mutantes" las abuelas de por aquí......
ResponderEliminarJua, jua, jua...... Yo le vendería la historia a Marvel y a vivir de los royalties!!!!!!!!
Cuando lo hagas, me mandas un poster para poner en la habitación del enano.
lapatachunga, ya lo dice el refran : "los niños y los borrachos siempre dicen la verdad"... con todo lo que eso conlleva...
ResponderEliminararraitz, tengo otro post en la recámara al respecto de las abuelas mutantes y estoy negociando con la Marvel por si toca la flauta y me retiran de trabajar en "la gran U". Cuenta con el poster y todo el merchandising.