El espejo de mi Alma

28/11/09

Sueño o realidad...


Mis migrañas han decidido quedarse conmigo mientras espero impaciente la llegada del esperado invierno, sin descartar ya la posibilidad de brindar por la Navidad desde la playa de la Barceloneta.


En Barcelona el tiempo es caprichoso y cambiante. Ayer todos los signos hacían prever un chaparrón de magnitud considerable pero, a la media hora escasa, un tímido sol empezó a romper las gruesas nubes invitando a mis neuronas a saltar de alegría propiciándome la anunciada jaqueca.


Si a esto le sumamos una semana dura de trabajo, viajes y actividades varias, el único plan válido para mi viernes noche era: pijama, mantita y película.


No recuerdo exactamente cuando, pero debí quedarme dormida mientras Bruce Willis decía una vez más “yipi-ka-yei, hijo de puta”… Sin embargo, esta mañana unos borrosos recuerdos me sobresaltaron y mi mente no sabía decirme si habían sido un sueño o eran reales. Así que he decidido explicarlo a ver si entre todos logramos deducir qué pasó...


Las imágenes difusas me transportaban a una especie de mercado de cuento dónde los dispuestos mercaderes alababan las virtudes de sus productos. Todas las gentes que abarrotaban los estrechos pasillos del mercado se sumergían en cada puesto buscando con anhelo su particular llave de la felicidad.


Para unos era un brebaje que les convertiría en apuestos caballeros y bellas doncellas con cuerpos perfectos. Las criadas de las reinas buscaban con fervor un ungüento que devolviera la juventud a los ajados rostros de sus amas. Los jóvenes aprendices intentaban parecer mayores gracias a un artilugio mágico que los hacía crecer. Los políticos de la corte regateaban por conseguir la concha mágica que revelara los secretos de sus oponentes y algunas esposas pedían discretamente la alhaja que les permitiría volver a conciliar el sueño al lado de sus maridos…


…Mi duda es si soñé con un mercado de cuento de hadas o acabé viendo la teletienda…

2 comentarios:

  1. Jua, jua, jua........ Yo pienso que es una mezcla de ambos. Lo de la teletienda es la venta de productos que en la vida hubiesemos pensado comprar, pero que te los adornan con un aura de maravillosos que hasta te crean la duda de si podrás seguir viviendo sin tenerlos ¿? Particularmente he decidido borrar todas las cadena del TDT que ofertan esos "maravillas"

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  2. Son como los charlatanes de feria que te venden el crecepelo maravilloso... todos juegan con los sueños y las inseguridades de las personas pero si nos paramos a pensar un poco, ¿quién no lo hace?

    Una duda, los has borrado para resistirte a la tentación??? jajajaja

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